24 Mar 2018 Campeona de Para-natación ha ganado 50 medallas de oro, plata y bronce
Sus días transcurren entre sombras porque tiene debilidad visual casi total. Sin embargo, podría decirse que su vida es de colores porque es una nadadora de alto rendimiento campeona del Mundial de Para-Natación y graduada de psicología por la Universidad Nacional Autónoma de México.
Matilde Estefanía Alcázar Figueroa, nació en la Ciudad de México y tiene 23 años. Su enfermedad es degenerativa y progresiva, así que actualmente sólo tiene visión al 10 por ciento, pero su entusiasmo, su disciplina y amor por la natación superan el 100 por ciento.
En el Campeonato Mundial de Para-Natación celebrado en la Ciudad de México a finales del año pasado, ganó la medalla de oro y en dos categoría más se quedó con una de segundo lugar de plata y la del tercer lugar de bronce.
Mientras acaricia sus tres medallas, asegura que como preparación para esa competencia tenía que practicar 16 horas al día. “Es un nivel muy fuerte y muy desgastante, pero cada día me levantaba con el sueño de la medalla”.
A lo largo de su carrera como nadadora, que inició desde que tenía 9 años, ha logrado acumular alrededor de 50 medallas, pero las que más valora son las tres del Campeonato Mundial de Para-Natación porque ese triunfo la posicionó entre las cinco mejores nadadoras con discapacidad, del mundo.
En los próximos meses, asistirá a dos competencias internacionales en Alemania y Brasil para mejorar su propia marca mundial y buscar su participación en los Juegos Panamericanos, que la llevarían a los décimo sexto Juegos Paralímpicos de Japón 2020.
Matilde Estefanía sabe que esas competencias no serán sencillas porque hay competidoras internacionales muy bien preparadas, pero asevera que no se trata de ganarle a la contrincante china o la americana, por mencionar algunas, “tengo que entrenar para conseguir mis marcas personales. Se trata de ganarle a Matilde, “a ella es a la que quiero ganarle y eso es lo que me motiva, aunque el entrenamiento sea muy pesado”.
Admite que en preparación para los Paralímpicos “Vienen ciclos muy importantes y años muy interesantes”, pero dice con firmeza que quiere conseguir su participación y seguir ganando esas medallas metálicas que representan su esfuerzo, de sus padres, de sus entrenadores y de otras personas que la han apoyado y han creído en ella en todo momento.
Opina que todo lo que hacemos tiene consecuencias positivas o negativas. Con discapacidad o sin ella, lo que importa es que como ser humano quieras y estés dispuesto a dar lo mejor de ti para alcanzar tus metas porque “esto no se acaba. Cada día tienes que corregir tus errores, aprender nuevas cosas y exigirte más”.
Oír el Himno Nacional Mexicano en otro país provoca una emoción muy hermosa que te hace querer brincar, llorar, gritar y que te llena de inmensa felicidad. ¡Quiero más de esa emoción!, asegura la campeona.