06 Mar 2019 ¿Cómo el fósforo del Sahara da vida al Amazonas?
¿Qué conecta el desierto más grande de la Tierra y el mayor bosque tropical? el fósforo.
Cubriendo el tercio más septentrional de África, descansa el desierto del Sahara, una de las regiones más áridas y calientes del planeta; al otro lado, en el noreste de América del sur, está el Amazonas, la selva con mayor biodiversidad del mundo. Estas dos regiones, que parecerían no tener nada en común, se conectan por un río de arena que se levanta desde el norte de África, atraviesa el océano Atlántico y llega a la selva amazónica.
Este viaje trasatlántico ya era algo documentado y estudiado por los científicos, pero por primera vez, un satélite de la NASA ha cuantificado en tres dimensiones la cantidad de polvo que realiza el recorrido. Pero no solo eso, también han calculado la cantidad de fósforo que lo acompaña.
¿Qué tiene el fósforo?
Antes de que el Sahara fuera el desierto más grande del mundo, contaba con varios cuerpos de agua ricos en minerales. Una zona particular, la Depresión de Bodélé en Chad, era un antiguo lago donde los minerales de roca compuestos por microorganismos muertos estaban llenos de fósforo.
El fósforo es un elemento indispensable para los seres vivos, y en el caso de la selva amazónica, es un nutriente esencial para el crecimiento y florecimiento de las plantas.
A pesar de que el Amazonas tiene muchos nutrientes, la lluvia y las inundaciones eliminan gran parte del fósforo del suelo. El nuevo estudio sugiere que cada año, los vientos otorgan alrededor de 22,000 toneladas más de fósforo desde el Sahara, lo suficiente para compensar lo que se perdió en el Amazonas.
Así, el fósforo, ese mineral del que seguramente has oído mucho, pero realmente sabes poco, recorre diariamente casi 5,000 km y desde el desierto del Sahara cruza el océano Atlántico para fertilizar la selva más grande del mundo y mantener el equilibrio del planeta.
Esta nota en video aquí: https://youtu.be/tbOe_2-IoR4
Fuentes:
NASA
AGU Journal