Convierten mina en parque de atracciones

Convierten mina en parque de atracciones

Dedicada a la extracción de sal de mesa desde la Edad Media hasta el año 1930, Salina Turda es una antigua mina de sal en Turda, Rumanía, que en 1992 se volvió a abrir y se reinventó como una atracción turística.

Gracias al juego de iluminación colocado, los visitantes pueden disfrutar a cientos de metros bajo tierra, de una noria, un anfiteatro, campo de minigolf, dos pistas de boliche, un campo de deportes, un parque infantil y un lago con barcas que se pueden alquilar para navegar.

La profundidad de la mina de 400 metros, permite crear un ambiente ideal para aquellos que sufren de problemas alérgicos o respiratorios. El interior mantiene una temperatura constante de 11-15 grados centígrados y un 80% de humedad, además cualquier tipo de bacterias están ausentes.

También cuenta con instalaciones de tratamiento médico (aire salado) para grupos de 50 a 60 personas, donde recomiendan permanecer por lo menos 30 minutos al día durante una o dos semanas, pero hay médicos que recetan estancias de hasta cuatro horas. Los visitantes pueden entretenerse durante ese tiempo, en el gimnasio o en una sala donde se puede ver la televisión o acceder a internet. Por si fuera poco, también cuenta con un anfiteatro que cuenta con 180 asientos calentados eléctricamente.

La mina de sal de Turda tiene un depósito de sal gema (aquella que procede de extracción minera) de más de 13 millones de años, un espesor medio de 250 metros (en algunos lugares llega a 1,200 metros) y pesa más de 38000 millones de toneladas. Para su construcción se usaron técnicas muy rudimentarias. Las minas se iluminaban con velas y lámparas de sebo y no usaron explosivos ni equipos mecánicos.

Fuente: www.nosabesnada.com