El Empire State y los materiales que lo construyeron

El Empire State y los materiales que lo construyeron

Entre 1931 y 1971 el edificio más alto del mundo fue el Empire State. Aún cuando ya había sido rebasado por otros rascacielos, fue el edificio favorito para el Spiderman que interpretó Andrew Garfield. Una obra que ha sobrevivido casi un siglo y se ha convertido en un ícono de Nueva York requirió materiales muy especiales para su construcción. Distintos minerales estuvieron ahí para darle forma.

A pesar de la crisis financiera que vivía Estados Unidos en aquella época (el crack del 29 había ocurrido poco antes), el proyecto fue ambicioso en todo momento. Se construyó sobre la 5a Avenida sobre el espacio que anteriormente ocupó el Hotel Waldorf Astoria. La obra fue financiada por General Motors y DuPont de Nemours. Se cuenta que John Jacob Raskob, quien era presidente de la General Motors, decidió construir un edificio más alto que el de su competidor: Chrysler.

El Empire State se construyó en tiempo récord y con un presupuesto menor al que se tenía planeado. Su construcción tardó 410 días. Inicialmente se presupuestaron 50 millones de dólares, de los que se usaron al final 40 millones 948 mil 900 dólares. Su proceso de construcción fue tan rápido y eficiente como le fue posible a sus constructores para disminuir costos.

Para hacer más eficiente la edificación, las piezas se construyeron por separado y lejos de la obra. La estructura de acero se hizo en Pittsburgh. Los revestimientos exteriores de piedra caliza se hicieron en canteras de Indiana, tenían las medidas exactas para montarse directamente. Los elementos de piedra y vidrio también llegaron listos para el ensamblaje.

Ya en la obra se diseñó un sistema de trabajo que facilitó la construcción. Sobre la misma estructura del edificio había grúas, rieles y carros con una capacidad mayor a la de las carretillas, también se recurrió a tolvas para almacenar los ladrillos y evitar usar el espacio público. Los trabajadores formaban equipos de cuatro donde el primero calentaba los remaches en la fragua y los lanzaba, el segundo los atrapaba en un recipiente de lata, los tomaba con pinzas y los golpeaba para tirar cenizas, después los insertaba en las perforaciones, el tercero sostenía el remache en posición para ser martillado por el cuarto que usaba una pistola de aire comprimido.

El Empire State se convirtió en uno de los edificios más grandes de la historia. Tiene 102 pisos, la altura hasta su observatorio es de 320 metros, el mástil de amarre llega a los 381 metros, la punta de su antena alcanza los 443 metros. En su construcción se usaron 57 mil toneladas de acero para su estructura. Se recurrió a 47 mil 042 metros cúbicos de concreto. Fueron necesarios 10 millones de ladrillos. También cuenta con 730 toneladas de aluminio y acero inoxidable.

Todo tipo de minerales se encuentran en el Empire State. Los más famosos entre ellos son el acero de su estructura y el mármol europeo de su vestíbulo. Recientemente el edificio tuvo remodelaciones para conservar su aspecto original, esto incluyó retirar el mármol que ya estaba dañado para colocar nuevas piezas.

No ha sido la única remodelación. En sus primeras décadas un mural cubría el techo del vestíbulo, este fue cubierto en los años 60. En 2007 comenzó a restaurarse, lo que requirió láminas de aluminio y oro. Actualmente, los visitantes pueden apreciar un vestíbulo similar al original.

Además de ser uno de los puntos obligados en las postales neoyorquinas, el Empire State es un ejemplo de ingeniería que perdura a través del tiempo. Ni su resistencia, ni su longevidad habrían sido posibles sin la combinación de minerales que lo conforman. Además de ser un edificio eficiente desde el momento de su creación, es una parada obligada para los visitantes de la Gran Manzana.

Fuentes

https://curiosfera-historia.com/la-historia-del-empire-state-building/

http://www.arquitecturaenacero.org/historia/edificios/empire-state-building-una-aproximacion

https://www.esbnyc.com/es/acerca-de/arquitectura-y-diseno