22 Dic 2021 En la Torre de Londres guardan las joyas de la Corona británica
La Torre de Londres es un castillo histórico situado en la ribera norte del río Támesis. Más allá de esta impresionante construcción, es famosa por el destacado papel en la historia de Inglaterra. Fue sitiada en varias ocasiones, ha servido como armería, tesorería, casa de fieras, Real Casa de la Moneda, registros públicos y casa de las joyas de la Corona del Reino Unido desde el siglo XIV.
Entre ellas están las tres coronas más importantes, como la Corona de San Eduardo, Corona Imperial del Estado y la Corona de la reina Isabel.
La Corona de San Eduardo, pesa dos kilos, es de oro y tiene incrustaciones de piedras preciosas y semipreciosas como turmalinas, zafiros, amatistas y perlas.
La Corona Imperial del Estado, cuenta con un rubí del príncipe negro (en realidad una espinela grande), situado en la parte frontal. Según la leyenda, esta piedra es de origen oriental y fue tomada por Pedro I el Cruel del rey moro de Granada. Finalmente, fue trasladada a Inglaterra como botín de Eduardo de Woodstock (Príncipe Negro), tras haber ayudado a Pedro I en la batalla de Nájera.
Y la Corona de la reina Isabel, la cual es la única corona de platino en la colección británica. Posee el diamante más antiguo conocido, el Koh-i-noor (Montaña de luz), descubierto en 1304.
Otras joyas son cetros, orbes, espadas, anillos, brazaletes, entre otros.
Fuente: www.inglesconcambridge.com