05 Mar 2020 Existen distintos tipos de imitaciones de minerales, sobretodo en el mercado coleccionista. Aquí te decimos las falsificaciones más comunes:
Las falsificaciones con plásticos y vidrios son las más usadas debido a su bajo costo, estos materiales pueden imitar muy bien piedras opacas y translúcidas, como el ámbar, la turquesa y la obsidiana.
También pueden pegar cristales teñidos de colores a la roca matriz para hacer más vistoso el mineral. La okenita la suelen falsificar de esta manera.
Otra forma de alterar un mineral, es de manera mecánica deformándolo en micro y microfracturas. Por ejemplo, a la fluorita le dan cincelazos para que tome una forma distinta a la original.
Someter un mineral a altas temperaturas hace cambiar su estructura interna y externa para imitar a otros. El cuarzo citrino falso es un buen ejemplo, ya que sus puntas ponen oscuras.
Existen rocas minerales pintadas con algún tipo de tintura, la ágata por ejemplo tiene tonos delicados, las falsas las llegan a vender con tonos magenta, azul, verde y violeta. El color intenso las delata.
La imitación puede considerarse como falsificación, como la turquesa que se puede confundir con la amazonita, con la crisoprasa o incluso con el jaspe verde, pero en el mercado no valen lo mismo.
Para diferenciar un ejemplar falso, puedes tomar en cuenta su dureza y tonalidad.