¿Mantener operando o no las minas durante una pandemia?

¿Mantener operando o no las minas durante una pandemia?

 Ante la emergencia sanitaria por Covid-19 se ha detenido la mayor parte de las industrias que trabajan en México. La minería sorpresivamente ha quedado fuera de las industrias consideradas esenciales, según el anuncio oficial del 30 de marzo pasado, lo que provocó desconcierto y el descontento generalizado del sector minero metalúrgico. Esta industria aporta más del 8% del Producto Interno Bruto Industrial del país y paralizarla provocará grandes pérdidas económicas, pero por desgracia el asunto no queda ahí.

El sector minero emplea a 370,000 trabajadores, e indirectamente a unos 2 millones de mexicanos. Si bien detener sus actividades abona a favor de los objetivos de distanciamiento social que se promueven desde el gobierno federal, provocará una serie de complicaciones mayores, no solo en el terreno económico, sino en el desabasto de materia prima imprescindible en el sector salud, no solo en México sino también en el entorno internacional, aunado al desamparo obligado de las comunidades donde esta industria opera y que generalmente provee de los servicios básicos de salud.

A nivel mundial México es un productor importante de materiales que consume y utiliza el sector salud. El ejemplo más claro de esto es el cobre, del que nuestro país es el 9º productor mundial, este metal es el material de superficies que ofrece la mayor resistencia al coronavirus, además de ser reconocido por su gran capacidad para conducir electricidad. Importante recordar, que parte del tratamiento para pacientes infectados incluye ventiladores y la respectiva infraestructura eléctrica que les da soporte.

Otro aspecto importante para esta etapa de aislamiento social es mantener una higiene estricta. Aquí aparece otro mineral que se produce en nuestro país: la sal; de la cual México es el 8º productor a nivel mundial. Se recurre a este mineral para la elaboración de cloro y sosa, químicos de amplio uso para la limpieza. Además, la elaboración de jabones la incluye como agente de carga y coagulante. Aunque la relacionemos con la cocina, la sal es de gran utilidad para mantener la higiene que se exige durante esta cuarentena.

Un tercer ejemplo, y no menos importante, es la fluorita, del que México es el 2º lugar en su producción a nivel mundial. El Ventolín, uno de los medicamento más utilizado para tratar crisis asmáticas, requiere de este mineral para transformarlo en un gas esencial para fabricar los inhaladores que utilizan los pacientes con enfermedades respiratorias, el grupo más vulnerable a la Covid-19.

Estos son algunos ejemplos de los metales y minerales en las necesidades inmediatas del país en este momento. Además se discute su influencia en otras industrias, que si bien no son indispensables para conservar la vida, también son importantes para la movilidad y atención de los pacientes y por supuesto para la economía mexicana.

Mantener funcionando o no las minas no es una decisión fácil, pero contar en todo momento con la materia prima, necesaria para la producción de herramientas y utensilios indispensables en el combate a esta pandemia, son nuestro mejor aliado.