01 Sep 2020 Minas para hacer turismo en México
Actualmente México es productor minero de gran importancia a nivel mundial y no es algo reciente. A nivel mundial nuestro país es el primer productor de plata y también es reconocido como uno de los 10 principales de otros 16 minerales. Para llegar ahí corrió una larga historia y muchas de las minas que en su momento fueron importantes en otras épocas ahora ya no tienen minerales pero sí mucho que contar a sus visitantes.
Al pensar en minería y turismo la primera imagen que vendrá para muchos es el pueblo fantasma, ahora pueblo mágico de Real de Catorce. Se ubica a casi 3 mil metros de altura sobre el nivel del mar al norte del estado de San Luis Potosí. Cuando los recursos mineros se agotaron el pueblo quedó vacío pero actualmente es un lugar con gran actividad turística. Los pasajes mineros ahora sirven de camino a los turistas que dentro del pueblo encuentran cafés al aire libre, artesanías wixárikas y distintas opciones de tour en los alrededores.
También existen minas que ya terminaron su vida útil y ahora reciben a visitantes que quieran recorrerlas. Estas aparecen en distintos puntos del mapa mexicano, lo que vuelve más accesible el turismo minero para quienes se interesen en probarlo.
Mina del edén fue un espacio donde se extraía oro y plata durante el virreinato. Se fundó en 1546 cerca de la ciudad de Zacatecas y su mejor momento lo vivió durante los siglos XVII y XVIII. Su periodo de explotación concluyó en 1960 después de sufrir inundaciones y también por su cercanía con la ciudad. Desde 1975 recibe turistas desde 1975 y tuvo una remodelación en 2005.
Bocamina de San Ramón se ubica en el estado de Guanajuato. Se trata de una exhacienda que vivió una época dorada durante el virreinato. Ahora es un museo en el que los visitantes pueden conocer la historia minera de la región mientras recorren sus túneles de 350 metros de profundidad. Se ubica cerca de Silao y además de su función de museo presta otros servicios.
Minas del Ópalo se ubica en “La Trinidad”, dentro del estado de Querétaro, aunque es más fácil de ubicar por su cercanía con Tequisquiapan. El lugar llamado “La Carbonera” es una propiedad privada que ofrece visitas guiadas para los interesados en observar ópalos, un mineraloide de sílice más blando y menos denso que el cuarzo.
Mina de San Antonio se ubica cerca de Mineral del Chico, estado de Hidalgo, en el corredor turístico Río del Milagro. La minería fue muy importante para el desarrollo de la región. Específicamente esta mina funcionó por casi 400 años a partir de 1565. Se mantuvo un tiempo abandonada y ahora está abierta a los interesados en recorrer sus tiros y socavones. El recorrido promete vetas de plata, identificación de pirita y cuarzo, así como historias y leyendas de mineros.
Mina de Acosta se localiza en Mineral del Monte, en el estado de Hidalgo. La mina comenzó a funcionar en 1727 y se mantuvo activa hasta 1985. Actualmente es un museo que aloja vestigios e instalaciones arquitectónicas que remontan a la colonia, así como la inmigración inglesa, pasando por la era del vapor y la llegada de la energía eléctrica. Ofrece servicios como visitas guiadas, talleres y proyecciones audiovisuales.
México es un país con una gran tradición minera y hay distintas opciones para conocerla. Estados como San Luis Potosí, Zacatecas, Guanajuato, Querétaro o Hidalgo tienen opciones para quienes quieran sumergirse en los túneles de los que alguna vez se extrajeron los minerales que circularon en nuestro país y en el mundo.