Nanopartículas de oro que acaban con bacterias

Nanopartículas de oro que acaban con bacterias

El oro tiene múltiples aplicaciones y la última que se encuentra en investigación es su uso como bactericida.
 
Con nanopartículas de oro con forma casi esférica y otras en forma de estrellas de unos 100 nanómetros de tamaño (unas 8 veces más pequeñas que el diámetro de un cabello), observamos que las bacterias se deforman como si se aspirara el aire del interior de un balón, y acaban muriendo ante la presencia de estas nanopartículas, explica Vladimir Baulin, investigador del Departamento de Ingeniería Química de la Universidad Rovira i Virgili.
 
La Universidad Rovira i Virgili (España), la Universidad de Grenoble (Francia), la Universidad de Saarland (Alemania) y la Universidad RMIT (Australia) son las que participan en este trabajo.
 
Como se sabe, el oro se ha utilizado para múltiples aplicaciones médicas, y más recientemente como elemento para diagnosticar y tratar enfermedades como el cáncer. Esto se debe a que es un material químicamente inerte, es decir, que no reacciona ni apenas se altera al entrar en contacto con algún organismo. Entre la comunidad científica las nanopartículas de oro son conocidas por su capacidad de visualización de tumores y también en nanomedicina.