30 Nov 2022 Rehabilitan minera Peñoles y Fresnillo Hacienda Pedriceña
Bajo la supervisión del INAH, Industrias Peñoles y Fresnillo plc, rehabilitaron la antigua Hacienda de Pedriceña, ubicada en Cuencamé, Durango, municipio a casi dos horas de la ciudad de Torreón.
La edificación data de la época colonial del siglo XVIII, y desde hace algunos años, se convirtió en el Centro de Capacitación Peñoles (CECAP), en el que a través de simuladores tecnológicos, no sólo se desarrolla la competencias de las personas y habitantes de la zona, sino que transforma y mejora su calidad de vida como técnicos en mantenimiento y operadores de vehículos y equipo minero.
“Además de que aprendan, se trata de cambiar y mejorar la calidad de sus vidas”, comentó Christian Burciaga, quien pertenece a la Subdirección de Relaciones Laborales y es Jefe de Capacitación para Baluarte Minero y coordinador de este recinto de capacitación.
También se imparten talleres de primeros auxilios, resaltando la importancia que tiene tanto en la prevención de accidentes como en la atención de inicio ante alguna posible contingencia médica. Los simuladores han sido desarrollados de manera local.
Luego del entrenamiento pasan al campo real al interior de mina de cuatro a seis semanas, para luego integrarse al área productiva; Durante la capacitación la empresa les paga un sueldo correspondiente.
Hombres y mujeres, algunos de ellos con el nivel educativo básico, logran cambiar sus vidas y su economía tras capacitarse en estas actividades. Tal es el caso de Juan Pacheco Contreras, uno de los instructores comentó: “Dentro de la minería llevo 15 años y como instructor cuatro años. Poco a poco nos hemos ido capacitando en la seguridad. Empecé en el área del equipo de Barrenación Larga, pasando luego a Jumbo. Luego nos llamaron al Centro de Capacitación de CECAP para ser instructor”.
Aprendiendo en los simuladores pasan dos semanas, ocho horas al día, que va desde el uso y manejo del equipo Jumbo y Scoop, y el otro se simula el manejo del Scooptram y el camión de bajo perfil. De ahí se van de cuatro a seis semanas a campo en mina.
La idea es que tengan un lugar digno para el aprendizaje. No solo es capacitación sino transformar vida, a través del conocimiento y la educación, se le da la oportunidad de tener una vida diferente, mayor remuneración económica, que impacta en sus familias.
La Hacienda de Pedriceña continúa marcando la historia de estas y otras comunidades, de sus pobladores. Si llegan de otras regiones del país, Peñoles les da hospedaje, alimentación además de un sueldo en tanto pasan por el proceso de capacitación; el entorno va más allá el de un centro de capacitación, es más un hotel, un centro de esparcimiento, en donde la convivencia diaria permite, no sólo la preparación profesional, contar con un oficio mejor remunerado hasta incluso, hacer nuevos amigos.
Fuente: www.outletminero.org