Un mineral buscado por mucho tiempo emerge dentro de un diamante.

Un mineral buscado por mucho tiempo emerge dentro de un diamante.

En el manto de la Tierra se forman minerales a temperatura y presión muy altas, al menos eso se espera teóricamente. Sin embargo, confirmar su existencia no es sencillo, al salir de las condiciones en que se crean ya no es posible que mantengan su forma. Eso hace tan sorprendente que se haya encontrado “Davemaoita”. La forma en que llegó a la superficie fue dentro de diamantes donde se les reconoció como pequeñas manchas.

Durante décadas se buscó este tipo de material, sin éxito. Los diamantes donde se le encontró provienen de una mina africana. Oliver Tschauner, quien es Geólogo en la Universidad de Nevada, en las Vegas y participó en el equipo que lo estudió, explica que esto es apenas un vistazo a un raro material que normalmente no puede existir en la superficie pero tiene una gran importancia en el flujo de calor en el interior del planeta.

La mayor parte de la davemaoita es silicato de calcio (CaSiO3). Dentro de ella se pueden rastrear isótopos de uranio, torio y potasio. Estos isótopos generan una gran cantidad de calor en la capa interna del manto terrestre. Podemos aprender mucho sobre cómo interactúan el manto y la corteza terrestre gracias a este descubrimiento.

El diamante sirvió como contenedor para evitar que el mineral desapareciera al salir del manto. Normalmente se le encontraría entre 660 y 2,700 kilómetros de profundidad. “Es la fuerza del diamante lo que mantuvo intactas las inclusiones a una gran presión”, explica Tschauner. El viaje de este extraño mineral pasó hace algunas décadas por la mina de diamantes Orapa en Botswana. En 1987 la compró el minerólogo George Rossman, quien trabaja en el Instituto Tecnológico de California en Pasadena. Junto con Tschauner y un grupo de colegas comenzaron a estudiar estas pequeñas manchas en el diamante hace algunos años.

Lo que encontraron fue un cristal con estructura de perovskita, un mineral que se produce en laboratorio. Teóricamente tendría que existir en el manto de la Tierra. Su estructura tiene las condiciones para formarse entre 660 y 900 kilómetros bajo la superficie terrestre. Ya en 2018 se había encontrado un silicato de calcio con una estructura de perovskita; en aquella ocasión se encontró en Sudáfrica y el equipo de investigadores no pidió el reconocimiento de un nuevo mineral. El nombre que Rossman, Tschauner  y compañía eligieron para el nuevo mineral hace referencia a Ho-kwang ‘Dave’ Mao, un pionero de la investigación geofísica y geoquímica a presiones altas.

La Asociación Mineralógica Internacional aprobó el nombre de davemaoita recientemente. A pesar de lo raro de este mineral, no es el primero que se registra con una estructura de este tipo. Ya en 2018 un grupo de investigadores chinos habían descrito a la maohokita, que se encontró entre las rocas de un cráter. La diferencia en esta ocasión es que proviene del interior de nuestro planeta en un contenedor especial.

Nuestro planeta está repleto de minerales, muchos de los cuales sólo podemos imaginar. Si bien, la Tierra es rica en muchos que usamos a diario, también desconocemos a muchos de ellos. Ahora tenemos la confirmación de una estructura mineral que se había teorizado hace mucho. Todo gracias a un viejo conocido: el diamante. ¿Cuándo será la próxima vez que emerja a la superficie otro obsequio de las profundidades de la Tierra?

Fuente: https://www.nature.com/articles/d41586-021-03409-2